Tyrannis
Beto, Fernando y Juancho son partes del mosaico que se
desgrana de Tyrannis. Con precisión admirable, Andrés Rodríguez capta el pulso
acelerado, el habla intempestiva y radical del universo juvenil. Los sistemas
educativos de Tyrannis pululan alrededor de estos jóvenes y abordan la agonía
de un régimen en decadencia.
La novela del santafesino no da tregua. El ritmo es implacable
y establece una crítica feroz a los medios de comunicación en ese constante
accionar contra la capacidad crítica. A medida que el lector entra en el mundo
de Tyrannis, encuentra los restos inevitables de la ideología que asoló a
nuestro país: la dictadura militar; legado triste que se manifiesta con más
virulencia en los regímenes panópticos, vigentes en los claustros educativos y
que prevalece intacta en ciertos sectores de la sociedad argentina.
Tyrannis es brasa apretada en el puño. Una historia dura
que toca las emociones del lector.