Una novela sobre el legado del miedo, donde la magia se escapa por cualquier rincón y una sombra constante acecha.
La marca de una amapola en la piel es signo inequívoco de algo mágico, sin embargo, las mujeres que la llevan pertenecen a un mundo humilde y miserable donde esa condición no tiene espacio.
Por ello, deciden ignorar la excelencia de sus dotes, procuran esconderla mientras continúan abrazando una costumbre perpetua.
Pero el último miembro del linaje ha crecido en pleno siglo XXI, y las cosas van a cambiar.